Gorras para correr.

Los corredores estamos muy expuestos al sol. Nuestros entrenamientos en su mayoría son al aire libre, por lo cual nuestra piel recibe muchos rayos ultra violeta. La gorra permite que cuidemos nuestra piel, al evitar que los rayos del sol caigan de forma directa en nuestra cara; y, además, evita que el sudor caiga en nuestros ojos.

A diferencia de las viseras, las gorras cubren toda nuestra cabeza, por lo que las personas que sufren de calvicie, o tienen poco pelo, deben usar siempre gorra y no visera.

Todas estas gorras traen tela de alta tecnología para el sudor, así que no te preocupes, tu cabeza se mantendrá fresca a pesar de que esté cubierta.